"Somos animales capaces de dotar de significados múltiples a nuestros propios gruñidos. Esta extraña habilidad nos ha permitido triunfar como especie, a pesar de no ser capaces de comprenderla"
(A. Iribar, 2008).
Algunas preguntas:
¿Cómo aprendimos a hablar y a cantar? ¿Cómo adquirimos la música y el lenguaje?
¿Qué fue primero? ¿Qué se aprende primero?
¿Qué relación guardan estas dos capacidades?
¿Cómo funcionan estas dos capacidades?
Buscaremos algunas respuestas (¡en ningún caso definitivas!):
2. Los poco definidos límites entre lenguaje y música
La Lingüística no ha encontrado una definición clara de la lengua.
Una lengua es “palabras y reglas”, o sea, un sistema de signos. ¿Qué es una “palabra”? ¿Qué es una “regla”? ¿Cómo es ese "sistema"?
Una lengua también es una interacción verbal social compleja.
Música es un concepto culturalmente variable:
Hay culturas que no tienen una palabra para "música":
Los pies negros (USA y Canadá) tienen palabras para "danza" (incluye la música y la ceremonia) y para "canto", pero no para "música".
La lengua hausa (Nigeria y Níger) sólo tiene palabras para actividades relacionadas con la música, no para la "música" en sí.
A lo largo del tiempo y del espacio, surge la duda: "esto no es música...".
En los últimos 250 años, los ruidos ha ido ganando terreno en la música occidental. Por ejemplo, desde la Sinfonía de los juguetes (s. XVIII) hasta el Welcome to the Machine
(Pink Floyd, 1975):
En definitiva, ¿hay unos materiales sonoros específicos para la música? ¿Y cuáles son?
Algunos productos de la actual música industrial no parecen muy relacionados con la idea habitual de música. Algunos ejemplos:
El Death Metal - El grito de la Bacaburra (Machetazo)
¿La sola percusión es música?
Diferentes agrupaciones de tambores
Una historia mediante body percussion: el grupo Mayumana
Hay expresiones culturales que parecen estar a caballo entre lenguaje y música.
Un acto lingüístico sin palabras ni significado, ¿es lenguaje o música?
Las frases sintetizadas sin contenido léxico-semántico del proyecto AMPER-EUSK.
El "diálogo" de dos bebés:
Los mantras:
Actos vocales de gran duración, que suenan como el lenguaje hablado, pero que pueden carecer de sentido y de estructura gramatical.
Requieren no sólo una pronunciación correcta, sino también un ritmo, una melodía, una posición corporal, una respiración…
Tres ejemplos: Mantra del Buda de la Medicina cantado por Lama Zopa Rimpoche - Sutra del Corazón recitado en Tibetano por los monjes del Monasterio Kopan (Tibet) - Monjes tibetanos en México
Los duelos vocales de las mujeres inuit:
Cantan a dúo, usando las bocas como resonador acústico.
No tiene texto, o carece de sentido actualmente.
Posible origen religioso; hoy tiene un carácter lúdico.
Todos nacemos con la capacidad de adquirir el lenguaje y con el reconocimiento innato de la música. Son facultades universales.
Ambas tienen límites geográficos, estilísticos, sociales.
Ambas pueden agruparse en familias, tienen un origen, una evolución.
Ambas comparten tres modos de expresión:
Vocal (palabra oral y canción).
Gestual (lengua de signos y danza).
Escrito o transcrito (como producto cultural).
Ambas comparten el fenómeno de la articulación (modificaciones sucesivas del sonido mediante movimientos de la lengua, etc.).
En ambas casos es difícil separar lo vocal de lo gestual:
La música arrastra nuestro cuerpo.
Es difícil hablar sin gesticular.
Ambas tienen una base biológica cerebral. Una patología puede causar afasia (pérdida del lenguaje) o amusia (pérdida de la música).
La adquisición de ambas es parecida (¿?):
Cualquier niño adquiere cualquier lengua de manera similar.
Los niños de sociedades tribales diferentes adquieren sus manifestaciones musicales de manera similar. (La cultura occidental y su música culta es tal vez una excepción.)
Ambas son sistemas combinatorios: los elementos acústicos (palabras o notas) se combinan para formar expresiones (oraciones o melodías), que a su vez pueden organizarse en periodos más complejos.
Esta combinación posee dos características comunes: la recursividad y el ritmo.
La recursividad:
Unos elementos se integran dentro de otros, de modo que con una número finito de elementos se puede generar un número teóricamente infinito de enunciados complejos.
Parece una característica exclusiva del género Homo.
La lingüística la considera un aspecto básico del lenguaje (Chomsky).
Suele olvidarse que también es fundamental en la música.
Una visión humorística:
El ritmo:
Los elementos se combinan mediante patrones temporales, que tienden a repetirse (isocronía).
No parece una característica exclusiva del género Homo.
Se entiende como una parte esencial de la música.
Suele olvidarse que también es fundamental en el lenguaje (en los enunciados y en los actos comunicativos).
Aunque sean sistemas jerárquicos construidos sobre unidades discretas, esas unidades son diferentes:
Las lingüísticas son signos arbitrarios (sgte. y sgdo.).
Las musicales carecen de sentido referencial.
Pueden aducirse ejemplos fronterizos
Algunas palabras pueden significar algo. Un ejemplo clásico es el de las voces de los animales.
Las frases estereotipadas, o las aprendidas de otras lenguas, ¿tienen significado?
Sólo la lengua posee una gramática.
Los elementos lingüísticos se combinan según unas reglas gramaticales. La lingüística chomskyana entiende que la gramática es universal.
En la música, los elementos se combinan normalmente siguiendo reglas o rutinas, pero éstas no componen una gramática, no son imprescindibles para su composición y su significado.
Las gramáticas lingüísticas cambian con lentitud (hay presión para la estabilidad).
Las “gramáticas musicales" cambian con rapidez (hay presión para el cambio).
La mayor diferencia es tal vez el contenido referencial.
La lengua tiene contenido referencial y finalidad comunicativa. La lengua tiene otras muchas funciones: expresiva, poética, conativa, fática, metalingüística (Jakobson).
La música no es un sistema de comunicación referencial:
A veces consigue transmitir significados.
Puede causar impresiones hondas, puede arrastrarnos el cuerpo... Es más manipulador que referencial (función conativa).