La Arquitectura de Documentos de Oficina (ODA) fue desarrollada en un principio por la Asociación Europea de Fabricantes de Ordenadores (ECMA).
Más adelante fue reconocida por la ISO y, junto con el Formato de Intercambio de Documentos de Oficina (ODIF), es en la actualidad un estándar internacional.
ODA se diseñó como un formato de intercambio para documentos elaborados mediante procesadores de textos destinado más a la comunicación entre sistemas de software que al uso directo por parte de usuarios humanos.
ODA asigna al texto dos estructuras paralelas:
De esta manera, la estructura lógica permite dividir un documento en capítulos, secciones y párrafos, mientras que la estructura de diseño lo define en términos de páginas, columnas, márgenes, etc.
Ambas estructuras se conciben como jerarquías simples: en el nivel más bajo de la jerarquía los elementos pueden estar compuestos por texto, gráficos de líneas, gráficos de trama, etc.
ODIF describe los formatos de codificación que van a utilizarse para cada clase de elementos.
Existe una clara coincidencia entre SGML y ODA/ODIF. Se ha dicho que SGML abarca a ODA/ODIF. Esta afirmación no es completamente cierta, ya que SGML no contiene un componente que se corresponda con la estructura de diseño de ODA.
Por otro lado, las estructuras que se pueden describir en SGML son mucho más complejas que las jerarquías simples de ODA.
Pero es bastante improbable que se utilice SGML, con todo su potencial añadido y la consiguiente complejidad de proceso que conlleva, para aplicaciones para las que ODA es suficiente.
Resulta obvio que SGML ocupa un lugar privilegiado en cuanto a la preparación de documentos complejos, en especial en lo referente a la documentación técnica.
Asimismo, SGML ha demostrado su valía tanto en el intercambio electrónico de documentos como en la difusión de información multimedia.