CULTURA EMPRESARIAL Y CLIMA LABORAL

 

 

CLIMA LABORAL

 

El clima laboral es el ambiente de trabajo que existe en un área, un departamento de la empresa.

Mientras que la cultura es única en la organización, sin embargo, el clima puede ser diferente en cada sección o unidad.

 

Hablar de clima es hablar de un concepto dinámico que se ve afectado por casi todo lo que ocurre en la empresa.

 

El clima influye en la motivación, el desempeño y la satisfacción. Un ambiente estable es una inversión a largo plazo, el medio forma parte del activo de la organización y como tal, debe ser valorado. Una disciplina exagerada o demasiadas presiones  pueden lograr un buen desempeño a corto plazo, pero con un costo importante a largo plazo respecto al clima.

 

Los valores que componen el clima son valores que no necesitan ser repartidos. Para conseguir la satisfacción de un empleado no hace falta perjudicar a otro.

 

Un experto en Comunicación y Personas debe conocer y utilizar instrumentos que definan el Clima laboral existente en un momento determinado, en un área concreta de la Organización o en cada una de las áreas.

 

 

 

 

 

 

 

El estudio y análisis del clima permite conocer las características y peculiaridades que definen el ambiente de la organización.

 

 

 

 

 

 

Antes de iniciar un proceso de cambio que afecte a los trabajadores de la empresa es útil como primer paso, identificar los puntos fuertes y débiles de la percepción de la situación por los empleados, saber qué aspectos pueden ser modificados y cuáles no, ya que las medidas de cambio pueden ser “inexplicablemente” boicoteadas.

 

El objetivo de un diagnóstico de Clima laboral es hacer seguimiento y valorar la evolución del ambiente, coordinando el diagnóstico entre diferentes niveles y departamentos.

 

El segundo paso será la realización de una serie de entrevistas abiertas a una muestra del colectivo, en la que se tratarán problemas generales.

 

 

 

 

 

A partir de los contenidos recogidos se identificarán los centros de interés, que posteriormente, se trabajarán en pequeños grupos homogéneos dirigidos por un asesor, experto en comportamiento humano. El objetivo es conocer la valoración, posturas, actitudes y comportamientos de cada grupo ante los contenidos seleccionados.

 

 

 

 

 

Teniendo en cuenta la información aportada por los grupos, se creará un instrumento de medida, un cuestionario compuesto por preguntas cerradas y abiertas.

 

 

 

 

 

El cuestionario conviene aplicarlo a toda la plantilla. Después de la recogida y tabulación de datos, se procederá al análisis y valoración de la situación y estudio de las posibles alternativas que se presentarán a Dirección.

 

 

 

 

 

 

El informe que se presenta como resultado del proceso de trabajo llevado a cabo, incluirá una explicación detallada del desarrollo del estudio de clima, cuáles han sido las fases del análisis, metodología, equipo de trabajo, muestra seleccionada, resultados, etc.

 

Debe estar escrito de forma clara y breve. Un buen esquema para realizar el informe de clima sin que se olvide ningún parámetro importante, es el siguiente:

 

 

 

 

 

 

CULTURA ORGANIZACIONAL

 

Cada organización tiene un “algo” especial que la diferencia de otras, algo que hace fácil o difícil la puesta en práctica de determinadas políticas o la adaptación de algunas personas. Al mismo tiempo cuesta definir en qué consiste ese aspecto diferencial, cómo influye en la vida de la organización y cómo modificarlo, si es preciso.

 

 

 

 

 

 

Ese “algo” se denomina estilo, ideología, valores, ideario. En definitiva, es la cultura organizacional entendida como el conjunto de principios y creencias básicas de la organización compartidas por sus miembros y que la diferencia de otras organizaciones.

 

 

 

 

 

 

Los principios y creencias son compartidos por todos los miembros de la organización y a la vez son distintos de los de otras empresas. Cada uno tiene sus principios diferentes que atraen a un tipo de colaboradores, sobre todo a nivel directivo.

 

Los principios o estilo propio se han ido formando a lo largo de los años hasta constituir un “credo” común a todos los miembros.

 

En mayor o menor grado, en todas las organizaciones existen unos rasgos que identifican el estilo de la empresa.

 

 

 

 

 

 

Si admitimos que la Cultura Empresarial es el común denominador de los valores, ideales y creencias del colectivo empresarial, que le hace distinta de otras Culturas, los rasgos que caracterizan a una Cultura fuerte son los siguientes:

 

 

 

 

 

 

Una organización no es eficaz por una determinada cultura, sino porque todos los elementos que la componen forman un todo coherente y equilibrado. Lo que hace que exista una salud organizativa es el equilibrio externo (adaptación) con el interno (integración).

 

Un cambio cultural presenta enormes dificultades, sobre todo si se trata de una cultura fuerte.

 

Ello supone cambiar expectativas y el espíritu de las personas. Las creencias arraigan profundamente.

 

 

 

 

 

 

Para producirse el cambio es imprescindible:

 

·         El consenso de todos los directivos en varios escalones.

·         Amplia difusión a todo el personal de las líneas maestras del cambio.

·         Programa de reuniones sobre el nuevo “SABER SER”. Plan de Formación.

·         Disponibilidad de tiempo y dedicación para cimentar el cambio.

·         Destacar los aspectos positivos de la antigua cultura.

·         Que todos los actos aún los más intranscendentes, apoyen la nueva cultura que se quiere implantar.

 

 

 

 

 

 

En la mayoría de los casos, es el fundador o creador de la empresa quien ejerce mayor impacto en la formación de la cultura. Sus valores, ideas y personalidad, incluidos por los valores del propio entorno constituyen la base a partir de la cual la empresa inicia su existencia, sobrevive a las dificultades y se desarrolla.

 

 

 

 

 

 

Estos principios culturales han sido aceptados como propios a través de los años y se manifiestan mediante políticas, estructuras, procedimientos, normas de conducta, signos externos.